Stone está alojada en un burdel de Las Vegas, Estados Unidos, donde la prostitución es legal, y por la transacción su dueño, Dennis Hof, aspira a llevarse el 50%.

Hof le aseguró a CNN, quien registró la historia, que recibe varias solicitudes para vender la virginidad “un servicio de una sola vez”.

Stone tiene 20 añitos y quiere estudiar derecho, y llegó al burdel por física necesidad: en el 2014 la casa que habitaba con sus padres se quemó y, debido a que no tenían seguro, tuvieron que permanecer en la propiedad quemada.

“La gente dice que se supone que usted lo debería hacer por amor, por si usted lo piensa, lo estoy haciendo por amor a mi familia”, dijo Stone a CNN.

Incluso una vez su virginidad haya sido subastada, Stone piensa seguir trabajando en el burdel por unos 5 años.

A pesar de que dice estar esperando un hombre con el que haya conexión, otros medios dicen que lo que pretende es que la oferta llegue al menos al medio millón de dólares.

“Esto no solo es un asunto de plata”, le dijo a CNN, y luego agregó: “Tengo derecho a escoger qué hago con mi cuerpo, y con esta economía en problemas, ¿me culparía?”.

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