El caso de Acapulco se dio luego de que unos delincuentes robaron un carro y la policía atendió el llamado de algunas personas. Cuando los oficiales llegaron al lugar, empezaron a disparar. Los asistentes al acto religioso trataron de refugiarse en medio del pánico, informa El País.

Según el portal católico ACI Prensa, 2 de los ladrones murieron, uno por un paro cardíaco y otro por uno de los impactos de bala que recibió. La misma fuente afirma que ninguno de los participantes de las procesiones (ni en Acapulco ni en Reynosa) resultó afectado.

Este video muestra el momento de la balacera y la reacción de los presentes:

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Por su parte, el incidente en Reynosa ocurrió luego de que una patrulla de la policía fuera atacada por un grupo armado a bordo de una camioneta, a pocos metros del lugar por el que pasaba la procesión. Luego de eso, los afectados, con la colaboración de miembros del ejército, empezaron a perseguir a los delincuentes, uno de los cuales murió por un disparo de los uniformados.

Este video muestra el incidente de Reynoso:

En ambos casos, las procesiones fueron suspendidas.