En su intervención, Spiers, oriundo de Inglaterra, iba a hablar sobre un supuesto plan de los gobiernos del mundo para ocultar información relacionada con ovnis. Por eso, su madre cree que su fallecimiento hace parte de ese mismo plan, informa el medio británico Express.

Dos días antes de su muerte, el experto le había enviado varios mensajes de texto a su madre, Vanessa Bates, en los que le decía que “tu hijo está en peligro. Si algo me pasa, investiga”.

Las autoridades locales dijeron que el hombre falleció por causas naturales. Sin embargo, la madre tiene dudas al respecto, indica Telegraph.

Creo que Max había cavado en algunos lugares oscuros y temo que alguien lo quisiera muerto”, dijo Bates, citada por RT, sobre el deceso de su hijo.

Dado que el estado de salud de Spiers era óptimo, muchas personas cercanas a él albergan la posibilidad de un envenenamiento. “¿Si no fuera cierto aquello de lo que hablaba, por qué habrían de matarlo? Las personas sanas no se enferman y mueren, son envenenadas”, dijo el bloguero Craig Hewlett, citado por el mismo medio.

Sarah Adams, novia de Spiers, va incluso más allá, y afirma que la muerte del ufólogo pudo hacer parte de un rito satánico, añade The Sun. “Estaba aterrado, quería irse. Quería volver a Inglaterra porque íbamos a casarnos y a tener un bebé. Él era el amor de mi vida”.

Contrario a todo eso, Nick Pope, periodista y especialista en ufología, dijo que las teorías conspirativas son todas falsas. De hecho, en su cuenta de Twitter, escribió que “La muerte de Max Spiers es una tragedia, pero después de dirigir el proyecto sobre ovnis del gobierno de Reino Unido, juro que no andamos por ahí matando a los investigadores de ovnis”.

El misterio sobre su muerte continúa.

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