En su cuenta de Twitter, Trump escribió, refiriéndose a enero de 2017:

“Pregunta: Si toda la injerencia rusa tuvo lugar durante la administración Obama, justo hasta el 20 de enero, ¿por qué no son ellos sujetos de la investigación?”.

“¿Por qué Obama no hizo algo sobre la injerencia? ¿Por qué los delitos demócratas no están bajo investigación? ¡Pregunten a Jeff Sessions!”, agregó el mandatario en referencia a su fiscal general.

Sessions se inhibió de la pesquisa iniciada por el Departamento de Justicia que dirige, tras conocerse que había sostenido encuentros no revelados en 2016 con Sergey Kislyak, exembajador ruso en Washington.

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Antes de concluir su mandato, Obama impuso sanciones económicas contra instituciones y empresas de Rusia por los ataques cibernéticos registrados durante la campaña electoral y ordenó la expulsión de 35 diplomáticos rusos, entre ellos el cónsul en San Francisco (California).

El fiscal especial Robert Mueller es el responsable de investigar los posibles lazos entre miembros de la campaña de Trump y el Gobierno ruso, al que las agencias de inteligencia de Estados Unidos, entre ellas el FBI y la CIA, acusan de interferir en las elecciones de 2016 para favorecer al republicano frente a su rival demócrata, Hillary Clinton.

Mueller ha acusado formalmente de diversos delitos a 13 ciudadanos rusos y 3 compañías de ese país de haber lanzado “una guerra informativa” en internet para dividir a la sociedad estadounidense.

Previamente, el fiscal especial también había imputado a cuatro personas relacionadas con el actual mandatario: Rick Gates; Paul Manafort; su exasesor de seguridad en la Casa Blanca Michael Flynn, y otro exasesor, George Papadopoulos, que trabajó para el magnate durante las elecciones.

Con EFE