Luego de varios días de escándalos concentrados en la figura de Trump, Obama afirmó que el magnate inmobiliario de 70 años “no está preparado” y “es incapaz para fungir como presidente” de Estados Unidos.

“Lo sigue demostrando”, apuntó el presidente estadounidense en la Casa Blanca junto al primer ministro de Singapur, sin tapujos de ventilar frente a su invitado las rupturas de la política interna estadounidense.

Aliados políticos de Trump han intentado distanciarse de los numerosos escándalos provocados por el vilipendioso magnate, quien no ha escatimado en buscar peleas con musulmanes, bomberos, soldados y hasta un bebé llorón.

El congresista Richard Hanna dio un paso más allá, y se convirtió en el primer legislador republicano en anunciar que votará por la rival de Trump en noviembre, la demócrata Hillary Clinton.

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Obama dirigió la artillería al liderazgo del Partido Republicano que parece cada vez más incómodo con Trump aunque sigue apoyando su candidatura.

“Esto no es una situación de una metedura de pata incidental; diaria y semanalmente están distanciándose de sus declaraciones”, dijo.

“Debe llegar un punto en que digas ‘éste no es alguien que pueda apoyar para presidente de Estados Unidos, aunque pretenda ser un miembro de mi partido'”.

“El hecho que eso no haya pasado todavía, hace que algunas de esas denuncias suenen vacías”, afirmó.

Altas figuras republicanas como el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, y el senador John McCain, critican a Trump pero no han retirado su respaldo a la candidatura republicana.

La tensión aumentó este martes en las filas republicanos, luego que Trump declaró no estar del todo seguro de reciprocar el apoyo en las campañas de reelección de ambos al Congreso.

“Debe llegar un momento en que dices ‘basta'”, dijo Obama.

Trump ganó fácilmente las primarias republicanas pero marcha entre siete y nueve puntos detrás de Clinton en las encuestas.

Obama apoyó públicamente a Clinton en las presidenciales de 2016 y ha arremetido anteriormente contra Trump.

En su discurso ante la convención del Partido Demócrata la semana pasada en Filadelfia (este), Obama describió al millonario como un demagogo que amenaza a la democracia.

Pero sus comentarios en la Casa Blanca marcan una escalada significativa y personal de la retórica presidencial.

Sobre sus rivales republicanos en 2012 y 2008, Obama dijo que “Mitt Romney y John McCain estaban equivocados en asuntos de política pero nunca pensé que no pudieran hacer su trabajo”.

“Sé que se cernirían a ciertas reglas, sentido común y tendrían decencia básica”, dijo.

“Ese no es el caso ahora”, apuntó.

Trump reaccionó en un comunicado, diciendo que los ocho años de gobierno de Obama son un ejemplo de “liderazgo fallido”.

Nuevo escándalo

Las declaraciones de Obama fueron formuladas en medio de un ácido intercambio verbal entre Trump y Khizr Khan, padre de un soldado estadounidense musulmán caído en combate en Irak en 2004 que fue invitado junto a su esposa a la convención de investidura de Clinton la semana pasada.

En un conmovedor discurso, Khan, que fustigó las declaraciones contra los musulmanes y los inmigrantes de Trump, dijo que el candidato republicano “no ha sacrificado nada ni a nadie” por el país.

Al sentirse “viciosamente” atacado, Trump arremetió contra este abogado de origen paquistaní y también insinuó que su esposa había sido forzada a guardar silencio durante la convención porque es musulmana.

Trump también ha sido criticado recientemente por aparecer en una entrevista en televisión como no estando informado de la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014 tras su ocupación de Ucrania.

Los señalamientos parecen no detener al candidato, quien este martes generó una nueva controversia, otra vez en torno al tema militar.

El millonario empresario, que evitó el servicio militar en Vietnam, agradeció a un excombatiente que le donó su prestigiosa medalla Corazón Púrpura, reconociendo que aunque siempre había querido tener una, era “más fácil” obtenerla de esa manera.

Estos últimos escándalos podrían ser un paso en falso en su carrera presidencial en un país que venera a los veteranos de guerra. Pero Trump ya superó una polémica el año pasado cuando atacó a McCain, prisionero de guerra en Vietnam, por dejarse atrapar.

AFP

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