El Transit Elevated Bus, que se presentó imponente ante el mundo por aparentemente ser la solución a los trancones al pasar por encima de los vehículos particulares, de hecho, está bloqueando una vía en la ciudad de Qinhuangdao, en la superpotencia asiática.

La empresa que fabricó el enorme bus alquiló ese trayecto de la carretera para poner en funcionamiento el atractivo invento, pero por ahora está quieto y custodiado por dos vigilantes, que afirman que los gerentes de la empresa abandonaron el lugar desde hace varias semanas y no han podido contactarse con ellos, informa Sixth Tone.

Y es que cuando se dio a conocer el ambicioso proyecto, en agosto pasado, a pesar de que tuvo mucha cobertura mediática, empezó a parecer una estafa a la que le llovieron muchas críticas y cuyos inversores pidieron que se les devolviera el dinero.

Ya en septiembre se quiso retomar el proyecto, pero no se pudo llevar a buen destino la idea, lo que confinó al bus al enorme garaje en el que está hoy, totalmente abandonado y cubierto de polvo.

El bus, de hecho, tiene varios detalles que ponen en tela de juicio su efectividad. Por ejemplo, los vehículos que pasan debajo de él no pueden tener una altura superior a los 2,1 metros, a pesar de que en China se mueven autos de hasta 4,2 metros, precisa RT.

Además, el bus de 22 metros de largo, que podría llevar en su interior hasta 300 pasajeros, puede resultar demasiado pesado para las carreteras del país oriental, en las que los hundimientos son muy comunes. De igual forma, la evacuación del vehículo, en caso de emergencia, puede ser muy problemática debido a su altura.

Así las cosas, parece estar liquidada la idea que muchas ciudades del mundo codiciaron cuando recién se presentó al público. De ella solo queda la prueba que duró apenas unos minutos.

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