Nayyef Hrebid y Btoo Allami se conocieron en un campamento, cuando uno de ellos salía de la ducha y el otro, que estaba descansando, lo vio y le pareció muy atractivo, narra la BBC.

Con el tiempo, se hicieron amigos, hasta que una vez uno de ellos le confesó que se había enamorado, a lo que el otro le respondió con un beso y así se formalizó el noviazgo.

No obstante, las relaciones homosexuales no son toleradas en Irak, y menos en el ejército, por lo cual ambos tuvieron que acudir a amigos para llevar su relación más o menos en secreto.

Unos años después, uno de ellos se fue a Canadá y como pudo logró que su compañero también fuera allí, donde se casaron, pero ya habían pasado 12 años. Poco después, se fueron a vivir a Estados Unidos, donde también se casaron y ahora viven su amor en libertad.

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