La esposa del ‘rescatista’ le mandó un salvavidas cuando vio que estaba en problemas, y tuvo que jalar y mantener la soga durante 30 minutos para evitar que fuera arrastrado hacia el mar antes de que llegara un bote salvavidas al lugar, informa Coastal Scene.

Keith Meldrum, uno de los miembros del equipo de rescate, afirmó que el agua “estaba fluyendo increíblemente rápido”, y el hombre estaba al borde de morir de frío y ahogado cuando, por fortuna, pudo ser rescatado. La esposa, por su parte, se quemó las manos con la soga, mientras que el perrito estaba en perfectas condiciones después de 20 minutos de abrigarlo con una cobija, precisa Newser.

Todos sabemos que la tentación de saltar al agua en un caso de estos es muy grande, pero esta es la segunda vez en este año que alguien ha ido a rescatar al perro, y esta es la segunda vez que alguien está cerca de la muerte cuando logramos sacarlo”, dijo el salvavidas.

La recomendación en estos casos es confiar en los equipos salvavidas cuando el perro se vaya al río. Según una publicación en Facebook, ellos han logrado regresar a las mascotas a los brazos de sus amos en perfectas condiciones.

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