Con la decisión que tomará la asamblea, el presidente Xi podrá gobernar más allá del año 2023, cuando se tenía previsto que abandonara su cargo. Ahora, podrá estar al frente de la potencia asiática al menos hasta 2035.

Con eso, parece estar claro (al menos para la clase política) que el mandatario es el único capaz de llevar al país a ser una nación innovadora y de realizar el “Sueño de China” de ser una nación totalmente moderna a mediados del siglo XXI, explica The Washington Post.

Pero no solo Xi parece regocijarse con su ampliación de poderes, ya anunciada hace unos días. También en occidente, y específicamente en Estados Unidos, el presidente Donald Trump ha mostrado su aprobación (y hasta alegría) por la consolidación de su colega chino, y hasta parece envidiarlo, a juzgar por unas grabaciones obtenidas por CNN en las que se le oye decir:

“Ahora es presidente de por vida. Presidente de por vida. No, él es genial. Y, miren, él pudo hacerlo. Creo que es genial. Quizá algún día lo probemos”.

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La actitud de Trump es curiosa por varias cosas, pero especialmente por dos: primero, porque los impuestos al aluminio y al acero que quiere implementar afectan directamente al gobierno chino de Xi, que ya ha dado muestras de una reacción vehemente; y segundo, porque sin sonrojarse, sigue expresando su apoyo a líderes autoritarios, como antes lo ha hecho con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y con el filipino Rodrigo Duterte.

Pero el comentario de Trump no les cayó bien a muchos en su país. Por ejemplo, el representante demócrata Ro Khanna dijo que, así hubiera sido en broma, es el “sentimiento más antiestadounidense expresado por un presidente de Estados Unidos”. Además, en referencia al primer presidente del país, dijo que George Washington se estaría “revolcando en su tumba”, cita Newsweek.

La Casa Blanca no ha dado declaraciones sobre el contenido de la grabación difundida por CNN.