Los residentes de Pontida, Italia, no están satisfechos con el nuevo reglamento aprobado por el partido de la Liga Norte. Aunque ofrecer parqueaderos exclusivos y cómodos para las mujeres embarazadas es una buena idea, la propuesta de los miembros de la junta municipal aclara, explícitamente, que los lugares asignados serán gratuitos solamente para mujeres que sostengan una relación marital con un hombre, afirmó el Mundo, de España.

En los sitios identificados como ‘parqueadero rosa’ se puede leer: “exclusivamente para las mujeres que pertenecen a un núcleo familiar natural y ciudadanas italianas o de un país miembro de la Unión Europea”, además, se explica detalladamente que “por ‘núcleo familiar natural’ se entiende una familia compuesta por la unión de un hombre y una mujer con fines de procreación”, agregó Cadena Ser.

“¿Es este lugar gratis? Depende, ¿le pediste a tu marido que se fuera?”

Bajo estas condiciones, las madres solteras, homosexuales o extranjeras no podrán hacer uso de estos parqueaderos.

“Los aparcamientos rosados de Pontida son pura discriminación. No hay una explicación válida para tal política. #LGBT”

El artículo continúa abajo

También te puede interesar

A los que todavía tienen 'papatusa', este video (oficial) de Francisco los aliviará

Las falsas declaraciones que circulan de Daniela Ospina sobre motivos de su divorcio

La evidente exclusión también generó rechazo en la comunidad política, el ministro de Agricultura, Maurizio Martina, manifestó que: “Es una medida vergonzosa que hace estremecer”.

A su vez, el secretario general del partido izquierdista italiano ‘Possibile’ calificó la medida como “un acto administrativo que confirma la peligrosa escalada de discriminación por parte de la Liga. Una locura que une racismo y homofobia”.

Debido a las críticas políticas y a las quejas de la comunidad, el alcalde del municipio, Luigi Carozzi, se vio obligado a cambiar las condiciones de uso para así asegurar que todas las mujeres, sin distinción, puedan acceder a los parqueaderos, concluyó El Mundo.

LO ÚLTIMO