Sin embargo, debido a que es senadora de la república y eso le otorga un fuero especial, Cristina Fernández de Kirchner no puede ser detenida. Por eso, el juez pidió retirarle ese fuero. La decisión de hacerlo o no depende ahora del Senado argentino, informa Clarín.
Fernández de Kirchner, presidenta argentina entre 2007 y 2015, es acusada de encubrir a Irán en el atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en 1994, en una de las acciones terroristas más graves que ha habido en ese país y que dejó 86 personas muertas.
El juez Bonadio dice que Fernández, en colaboración con el excanciller Héctor Timerman, organizó un “plan criminal” para dejar en la “impunidad” a los iraníes que tenían orden de captura emitida por la Interpol luego del mencionado atentado terrorista, declarado delito de lesa humanidad.
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El togado considera que por los contactos de la expresidenta, ella “puede entorpecer” la investigación de los hechos. Fernández de Kirchner, por su parte, ha señalado al Gobierno argentino de ejecutar una campaña de persecución política. También calificó el proceso en su contra como “un gran disparate jurídico”, cita La Nación.
Según ABC, de España, otros colaboradores cercanos a Cristina Fernández y su fallecido esposo, Néstor Kirchner (también expresidente), han sido detenidos. El juez Bonadio también los acusa a todos ellos de traición a la patria. Ese delito, según La Nación, tiene una pena entre los 10 años de cárcel y la prisión perpetua.
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