Luego del ataque del perro, un staffordshire bull terrier llamado Major, el documentalista tuvo que ser trasladado a un hospital de Londres, Reino Unido, donde falleció poco después debido a las graves heridas que había sufrido, informa Independent.

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Los miembros del equipo que trabajaba en el documental llamaron pronto a una ambulancia, luego de que lograron separar al animal del hombre de 41 años. Sin embargo, la policía tardó cerca de 10 minutos en abrir la puerta del apartamento, que estaba trancada.

En el momento del incidente, Perivoitos estaba trabajando en un documental llamado ‘Drugs Map Britain’. En la noche de su muerte, dice el citado medio, llegó a su casa sobre las 10 p.m. luego de haber consumido cocaína. Allí tuvo un episodio de epilepsia.

Nicholas Carmichael, un médico veterinario y toxicólogo, da por sentado que el animal también consumió cocaína, ya fuera por vía oral o aspirada, ya que en la orina del perro fueron hallados rastros de esa droga y de morfina, agrega The Guardian.

El coronel Andrew Walker concluyó que, luego de comerse la cocaína, el perro se vio provocado por el ataque epiléptico de su amo, y que eso llevó al mortal ataque. Según la policía, Major iba a ser sacrificado; sin embargo, aún no se ha confirmado que así haya sucedido.