Las investigaciones de la Policía Nacional junto a una unidad del Grupo de Menores, que adelantaron las pesquisas en Murcia, llevaron a conocer la identidad del padre del bebé, informa El País.

Según los primeros indicios de las autoridades, la relación sexual fue voluntaria y ocurrió cuando el hermano tenía 13 años. De manera que el menor no puede ser imputado y tampoco existe un delito por abuso, como se había especulado en un principio.

Sin embargo, las investigaciones todavía están en marcha, y los encargados aún deben obtener nuevas declaraciones de personas que hagan parte del entorno de la niña.

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Vale la pena recordar que la niña, cuya identidad no se ha difundido, fue con sus padres al hospital el viernes pasado luego de sentir un fuerte dolor de estómago. Fue allí donde se supo del embarazo y que la menor ya estaba en trabajo de parto.

Claramente ninguno de los familiares ni la niña les dijeron a los médicos que estaba embarazada, ya que, según aseguraron, no sabían (ni siquiera la implicada) que estaba esperando un bebé.

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