La demócrata, que aventaja a Trump en las encuestas, apuntó que ya había debatido con su rival “durante cuatro horas y media” en los tres debates presidenciales.

“Voy a dejar que sean los ciudadanos estadounidenses quienes decidan entre lo que ofrece y lo que ofrecemos nosotros. Así que puede decir lo que le apetezca”, agregó Clinton.

La campaña de Trump ha estado marcada por los ataques frontales hacia su rival, de la que ha dicho que cuenta con el favoritismo de los medios de comunicación en unas elecciones que ha criticado como “amañadas”.

Asimismo, ha insinuado su intención de abrir una investigación formal por el uso de un servidor privado para sus mensajes oficiales cuando era secretaria de Estado que podría llevar a Clinton “a la cárcel” y la calificó como “una mujer desagradable” en el último debate de esta semana en Las Vegas.

“Puede gestionar su campaña como quiera, puede irse por la tangente (…) Yo voy a seguir hablando de lo que queremos hacer”, subrayó la demócrata.

En los dos actos de campaña de hoy en Pensilvania, un estado clave para obtener el triunfo el 8 de noviembre, Clinton estuvo acompañada por su compañero de fórmula, el aspirante demócrata a vicepresidente Tim Kaine.

Mañana, la aspirante demócrata contará con la ayuda del actual presidente Barack Obama, quien participará en un mitin a favor de Clinton en Nevada, otro de los estados en disputa y que pueden decantar el resultado final.