El pequeño es un reconocido agente en esa ciudad y cuando se enteró de que algunos agentes tienen K9 (perros adiestrados para investigaciones policiales), “él dijo ‘tengo que tener un socio'”, aseguró a Inside Edition la madre del menor, Brandi Davis.

De acuerdo con su relato, adquirieron a Ruby luego de que su anterior perro, de 14 años, muriera en febrero pasado.

La familia de la perrita, de 4 meses, la lleva a clases de comportamiento desde que está en su hogar; sin embargo, Oliver ha tomado el liderazgo de ese entrenamiento para asegurarse de que sea la mejor compañera policía, contó Brandi a ese portal.

“Él piensa que la está entrenando para ser una verdadera agente de policía, enseñándole a sentarse y a acostarse”, comentó al medio.

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La mujer añadió que, como ‘policía’, su hijo se encarga de sorprender, “con flores y abrazos”, a las personas que visita en los ancianatos que ‘patrulla’. Si bien la idea es que Oliver vaya acompañado de Ruby, ella todavía se pone nerviosa ante los extraños, por lo que esperarán hasta que sea un poco más grande para llevarla con el pequeño.

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