Un policía vio que la camioneta de la mujer, identificada como Jamie Gilt, estaba detenida en un camino y al acercarse la encontró pidiendo ayuda en el asiento del conductor. El único ocupante aparte de ella era el niño, que no resultó herido, según reporta CNN.

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Gilt, quien se encuentra fuera de peligro, tenía una página en Facebook en la que abogaba por el uso de las armas y en su página personal se mostraba orgullosa de decir que incluso su hijo se emocionaba por disparar con un arma calibre 22. Ambos sitios fueron retirados de la red social.

Las leyes del estado de Florida, donde ocurrió el incidente, consideran un delito menor que se guarde o se deje un arma de fuego cargada donde un niño pueda alcanzarla.

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