Según la agencia estadounidense, las orcas negras, o falsas orcas, pesaban cerca los 700 kilogramos y tenían una longitud de hasta unos 6 metros.

Todavía se desconocen las causas de lo que ocurrió a este grupo, entre los que se encontraban tanto hembras como machos de todas las edades.

Por eso, las autoridades están tomando muestras y haciéndoles autopsias a los animales.

Mientras tanto, la zona donde los cetáceos quedaron varados fue cerrada por el Servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos.

La NOAA, por su parte, pidió a través de las redes sociales que “por seguridad” no haya botes ni sobrevuelos en la zona, donde hay presencia de tiburones.

Estos cetáceos formaban parte de un grupo de 95 orcas que aparecieron en Cayo Hog, en el extremo sur de Florida, y del cual solo una consiguió sobrevivir.

Otras 13 orcas que fueron avistadas en la zona están desaparecidas y la misión de las autoridades es buscarlas con ayuda de un avión de la Guardia Costera estadounidense.

EFE