El esposo, Wilf Russell, había tenido que ser recluido en un hogar de reposo, hace un par de meses, después de haber sido diagnosticado con demencia, informó Leicester Mercury. Russell era un ingeniero retirado y tenía 93 años.
Por su parte, Vera, la esposa, comenzó a sufrir problemas de salud poco después de que fue a visitar a su marido al hogar de cuidado y él no pudo reconocerla.
La nieta de la pareja, Stephanie Welch, le contó al Leicester Mercury cuáles fueron las últimas palabras de su abuela:
Somos una buena pareja, ¿verdad?”
Welch, también dijo:
Creo que ella estaba esperando que se vaya. Estaba con el corazón roto”.
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Sin embargo, Vera falleció sin saber que su esposo había muerto, aclaró Daily Mirror; ella fue declarada muerta a las 6:54 a.m. hora local, cuatro minutos después que Wilf.
La pareja se conoció hace 75 años y se comprometió antes de que Wilf fuera enviado a luchar en Italia y el norte de África, durante la Segunda Guerra Mundial.
Wilf y Vera dejan dos hijos, cinco nietos, siete bisnietos y dos tataranietos.
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