Sin embargo, las imágenes en realidad son montajes, pero su calidad es tal que parecen reales… y por eso dan tantos nervios. El motivo de las fotos es bastante noble: la pequeña estuvo internada en un hospital, donde tuvo que someterse a quimioterapia y a un transplante de médula. Por eso, citado por Mashable, el padre dice:

Como perdimos muchas de las cosas normales que hacen los niños en su primer año de vida, tomamos un montón de fotos ahora que podemos hacer cosas normales fuera del aislamiento”.

Esta es una imagen de Hannah, la pequeña, cuando estaba en el hospital:

Making a break for the exit ☺️

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Y estas son algunas de las fotos más llamativas y que más impresión causan, porque parece que la pequeña estuviera en peligro inminente:

Getting some air

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Someone is a little unhappy about the Christmas decorations going away.

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I think the new stair gates may be faulty.

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Cooking up a storm (before everyone goes crazy, don’t worry, the oven clock is set wrong, she isn’t actually still awake at 9.35pm)

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Taking advantage of the quiet bank holiday roads to give Hannah her first driving lesson.

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Crowley espera que, dado que las fotos de su hija se han viralizado en internet, eso sirva para crear conciencia de la importancia de donar médula, que es un proceso muy dispendioso y hasta improbable. El propio caso de Hannah parece increíble: de 27 millones de donantes, solo 3 de ellos eran compatibles con la pequeña, comenta El Huffington Post.

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