El tren salió de Santander a las siete de la tarde con 109 pasajeros a bordo, y se detuvo a las 9:15 en la localidad de Osorno. Según la compañía ferroviaria Renfe, el maquinista alegó un “exceso de jornada de trabajo”.

Los conductores de tren españoles tienen un límite de horas de conducción sin pausa fijado por la ley en seis horas. Más allá de dicho límite debe tomar el relevo otro maquinista.

Sin embargo, en Osorno nadie tomó el relevo en la cabina, indicó Carlos Segura, portavoz del sindicato de maquinistas Semaf.

Los pasajeros llegaron a su destino de madrugada, con varias horas de retraso. Fueron transportados en taxi y autocar, y se les reembolsará el dinero del billete, indicó Renfe.

AFP

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