El Secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, reveló la información, y aseguró que el joven ya se encuentra de vuelta al país. Warmbier fue sentenciado a 15 años de trabajo forzado luego de que intentó robar un afiche de propaganda en enero de 2016, informa The New York Times.
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Los padres de Otto le contaron a The Washington Post que su hijo salió de Corea del Norte en estado de coma, luego de exactamente 17 meses de reclusión. Warmbier está en ese estado desde hace más de un año, poco después de su última aparición pública en Pyonyang, la capital del país, en marzo de 2016.
A la familia del joven le dijeron que Otto contrajo botulismo poco después de su juicio y le dieron una pastilla para dormir. Desde entonces no se despierta, narra el ‘Post’.
Se espera que el estudiante llegue a su casa en Cincinnati, estado de Ohio, este martes en la tarde, luego de haber salido de la zona a través de una base militar de Estados Unidos ubicada en Sapporo, Japón. El senador republicano Rob Portman, del mencionado estado, se pronunció al respecto.
“La detención de Otto y la sentencia fue innecesaria y espantosa, y Corea del Norte debería ser condenada universalmente por su abominable comportamiento”.
Desde su juicio, Warmbier no fue vuelto a ver en público y ni siquiera los diplomáticos suecos que representan a Estados Unidos en Corea del Norte (los norteamericanos no tienen embajada en el país asiático) pudieron ver al estudiante.
El Departamento de Estado de Estados Unidos les ha recomendado a sus compatriotas que no visiten Corea del Norte, cuyo régimen ha detenido a varios ciudadanos de ese país a lo largo de los años. Se sabe que al menos 3 estadounidenses permanecen detenidos en prisiones norcoreanas.
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