La mujer, habitante de Goldsboro, Carolina del Norte, había pagado 30 dólares por el congelador, que venía sellado con cinta adhesiva porque según la vecina se trataba de una “capsula del tiempo” que guardaba para la iglesia local y que la compradora solo debía mantener cerrado hasta que pasaran a recoger el contenido, informa ABC 11.

También le puede interesar:

Al día siguiente, la vecina que le vendió el congelador se fue de la ciudad y dijo que iba a West Virginia a reunirse con su madre, que estaba en un hogar de ancianos allí, añade WNCN. Sin embargo, la mujer no se llevó a su gato, que permaneció abandonado al frente de la casa.

Luego de que pasara el tiempo y nadie fuera a recoger el congelador, la mujer decidió abrirlo y averiguar qué ocurría.

“Levanté la tapa y vi un pie. Bajé la tapa y traté de analizar lo que había visto. Se veía falso, así que la abrí de nuevo y miré otra vez. Pero entonces reconocí a su madre. Era el pie de su madre”, dijo.

Inmediatamente llamó a la policía, que recogió los restos y posteriormente confirmó que se trataba de la madre de la vecina, que había fallecido de muerte natural y no poseía ningún signo de que hubiera sido víctima de un crimen.

La fallecida no había sido vista en el vecindario desde septiembre y se estima que su cadáver llevara entre 8 y 9 meses en el refrigerador.

Las autoridades investigan el caso como un delito de ocultar o no notificar la muerte de una persona.

Por su parte, la mujer que descubrió el cadáver se mostró satisfecha de poder darle paz a la fallecida.

Temas relacionados:

LO ÚLTIMO