Se trata de Eduardo Zárate, oriundo de la ciudad de Morelia, estado de Michoacán.

Cuando el sismo estremeció al país ‘manito’ el pasado 19 de septiembre, el especialista en terapias occidentales, de 26 años, no dudó en trasladarse a Ciudad de México para rescatar a Fernando, contó a Noticieros Televisa.

Su amigo “había quedado sepultado debajo de los escombros, en una de las edificaciones derrumbadas en la colonia del Valle”, aseguró Excélsior.

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Con un grupo de jóvenes, Zárate realizó una “colecta muy improvisada de víveres, medicamentos, ropa y cobijas”. Luego, viajaron a Ciudad de México.

En la capital mexicana, Protección Civil lo admitió como voluntario en la remoción de escombros. Entonces, el joven “trabajó 24 horas seguidas sin descanso, hasta que su cuerpo no dio más. Reposó unas horas y se reincorporó a su misión”, indicó el periódico.

Sus esfuerzos dieron fruto, pues contribuyeron a que Fernando saliera de los escombros. Igualmente, le causaron un esguince en la mano izquierda.

“Fue impactante. Nada más verlo y decir: ‘Edy, no te esperaba’, fue todo. Cuando lo vi salir, dije: ‘Venga, hay muchos más que pues pueden estar igual que él”, manifestó al diario.

“A Dios, gracias, (Fernando) está vivo, está bien, salió golpeado”, señaló al informativo.

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Zárate también fue de gran ayuda para el rescate de dos personas más, resaltó Excélsior.

En medio de las labores de socorro, en su silla de ruedas, el joven fue fotografiado. Las imágenes están circulando en redes sociales, y le han traído miles de elogios, aplausos, y el calificativo de “héroe”.

Zárate aún trabaja por la recuperación de México. Por el momento, está recolectando víveres en su ciudad natal, y, próximamente, volverá a la capital mexicana a desempeñarse como voluntario, añadió el periódico.

A través de Noticieros Televisa, el joven envió un mensaje a sus compatriotas, con el fin de que se unan por la reconstrucción de su país:

“Les quiero dejar este mensajito que espero les quede en el corazón: es momento de estar unidos, un país completo, que es nuestro hogar, nos necesita… Los invito ya no a remover escombros sino a la construcción de un nuevo país, a la reconstrucción de nuevos valores y de los hogares de las personas que lo perdieron todo. Es muy triste ver que mucha gente se quedó sin nada”.

 

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