Luego de que la alarma se disparara, oficiales se desplazaron hasta el lugar, donde hallaron el cadáver del hombre con heridas y graves quemaduras en su cuerpo. Por lo pronto, las autoridades tratan de establecer las circunstancias del fallecimiento, que hasta ahora se trata como accidental, dice CNN.
Bill Pellan, de la Oficina del médico forense del condado de Pinellas, dijo que la muerte se produjo por una herida de “proyectil” en la cabeza. Tal proyectil hacía parte de una sección del cigarrillo electrónico que el fallecido usaba, y que fue fabricado por la empresa Smok-E Mountain.
Las causas exactas de la explosión de un cigarrillo de este tipo no suelen ser muy claras, pero las evidencias apuntan a que problemas de las baterías con las que funcionan tendrían mucho que ver con las detonaciones que, como en este caso, pueden terminar en un desenlace fatal.
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La explosión ocurrió el pasado 5 de mayo, pero los resultados de la autopsia y los detalles del caso apenas fueron difundidos por medios en las últimas horas.
Según la Agencia Federal del Manejo de Emergencias, entre 2009 y 2016 hubo al menos 195 incidentes en los que un dispositivo de este tipo estalló o, al menos, causó algún incendio de diferentes magnitudes. Como resultado de todos esos accidentes, 133 personas quedaron heridas, 38 de ellas de gravedad. Sin embargo, hasta ahora no se habían reportado fallecimientos, agrega The Washington Post.
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