La mujer, que trabaja desde hace 28 años como limpiadora de un parque en la ciudad andaluza de Sevilla, relató cómo tras la muerte de una mujer llamada Sara el pasado 23 de febrero en el parque de Maria Luisa, decidió limpiar la escena del crimen luego de que la policía dictaminara que se había tratado de un suicidio con sobredosis de pastillas, según informa el diario La Vanguardia.

También le puede interesar:

“Lo extraño del caso es que llegaran a esa conclusión cuando toda la zona estaba llena de sangre”, dijo Moreno, quien descubrió varios pañuelos y protectores diarios ensangrentados detrás de la banca donde había sido encontrado el cadáver de la mujer de 31 años.

Como había aprendido a través de la serie, recolectó la evidencia en una bolsa utilizando otra como guante “para que nada se contaminara” y luego de haberse marchado del parque al final de su turno recibió una llamada de su jefe, quien le preguntó dónde había guardado la evidencia ya que la policía ahora investigaba un asesinato.

La autopsia había determinado que si bien Sara había consumido drogas con la intención de matarse, cómo había relatado en una nota hallada en su bolso, no murió por esto, sino que fue brutalmente violada y falleció por las heridas internas provocadas por el ataque.

La evidencia encontrada por Moreno logró establecer la identidad del agresor a través de una prueba de ADN, un hombre que resultó tener antecedentes de maltrato hacia su esposa. Por su colaboración, el fiscal del caso reconoció la ayuda de Moreno, ya que sin ella habría sido difícil probar el asesinato, añade el diario The Guardian.

LO ÚLTIMO