En un cambio de su postura inicial, que no acepta a juzgar por sus trinos, el próximo presidente de Estados Unidos comenzó las consultas para acelerar la construcción de su pared para frenar el ingreso de los inmigrantes por la frontera en el sur con recursos que primero tramitará en el Congreso.

El equipo de transición del nuevo gobierno ha sostenido reuniones con líderes republicanos en la Cámara de Representantes para evaluar la presentación de reformas legales que le permitan obtener los fondos necesarios, según CNN.

Según una fuente del partido republicano que habló con ese medio, el nuevo gobierno piensa acudir a una ley de 2006, que fue tramitada en la administración de George Bush, para construir el muro.

Sin embargo, no cuenta con el presupuesto para hacerlo, por lo que ahora será necesario que acuda al Congreso, que domina.

La estrategia sería cobrar después a México, a través de tasas arancelarias e impuestos a las remesas, por ejemplo.

Sus planes quedaron en evidencia con un trino de este jueves en la que la emprende contra los medios por supuestamente tergiversar esta información.

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