Lo único verdaderamente importante de su intervención, poco antes de su extraña interrupción, fue cuando se refirió a las inversiones millonarias y la generación de trabajo que varias empresas japonesas han impulsado en territorio estadounidense. Luego de eso, se detuvo para buscar  su botella de agua, que tardó varios segundos en encontrar.

“No tienen agua. Está bien”, dijo el presidente antes de que le informaran que su ansiada botella estaba ubicada encima de una mesa pequeña que había junto al atrio desde el que le hablaba al país. Allí, con mucha seriedad, abrió el envase y tomó un sorbo de agua, antes de seguir.

Este es el video de la extraña interrupción de Trump:

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Uno de los que gozó con la ‘embarrada’ de Trump (no es habitual ni muy bien visto interrumpir un discurso así para pedir agua) fue el senador Marco Rubio, que tenía una ‘pelea’ con el mandatario luego de un episodio similar que el legislador protagonizó en 2013. En la campaña presidencial, Trump le pasó ‘cuenta de cobro’ luego de un discurso en el que regó agua por todo el escenario y luego tiró la botella a sus espaldas:

Luego del ‘papayazo’ de Trump en la noche del miércoles, Rubio escribió en Twitter:

“Similar, pero necesita trabajar en su forma. Se debe hacer en un solo movimiento y los ojos nunca deberían dejar de mirar la cámara. Pero no está mal para ser la primera vez”.

Independent recuerda que en la ‘metida de pata’ de Rubio, Trump escribió en su cuenta de Twitter que el líder republicano debería tomar agua de un vaso y no de una botella, y así tendría “un impacto mucho menos negativo”. Parece que el presidente olvidó ese detallito… y también el “gran anuncio” que dijo que iba a hacer en la noche del miércoles.

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