Según The Guardian, dos terceras partes de las empleadas que trabajan en restaurantes de comida rápida operados por CKE (propietaria de restaurantes como Carl’s Jr y Hardee’s) han experimentado algún tipo de abuso sexual en el trabajo, lo que representa un porcentaje mucho mayor que el promedio de agresiones que hay en ese medio.

Sin embargo, estos abusos no son las únicas agresiones contra la mujer que vienen desde la cadena de comida de Puzder, a quien le gustan mucho los comerciales provocativos y casi pornográficos que, con la participación de figuras como Kate Upton, Paris Hilton y Charlotte McKinney, buscan atraer, a través del cuerpo de la mujer, a jóvenes clientes.

Este es el de Carl’s Jr en el que interviene Charlotte McKinney, que fue emitido en el Super Bowl:

Cualquiera podría pensar que se trata más de una cuestión de publicidad que de dueño, pero en este caso no es así ya que, pese a que Puzder no creía antes que las marcas asumieran la personalidad de su CEO, ahora sí lo considera así, informa Bloomberg. De hecho, admite directamente que le gustan este tipo de comerciales:

Me gustan las mujeres que comen hamburguesa en bikini. Creo que es muy estadounidense”.

The Guardian también le recuerda a Puzder que el año pasado dio una entrevista “alegremente” en la que hablaba de la posibilidad de reemplazar a los humanos por robots. La respuesta que dio pareció indicar que prefería a los segundos por razones tan claras como lamentables:

Ellos (los robots) siempre son educados, elevan las ventas, nunca toman vacaciones, nunca llegan tarde, nunca se caen y no hay casos de discriminación por edad, sexo o raza”.

Después de esos antecedentes, el medio británico lanza una pregunta que acá nos atrevemos a complementar: ¿Puzder se siente capaz de garantizarles bienestar laboral a los trabajadores de todo el país (especialmente a las mujeres) y asegurarles que los tratará con respeto?

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