Según su relato, los dos deportistas, de la Universidad Sacred Heart, la violaron en un baño en octubre pasado, durante una fiesta fuera. Los acusados, sin embargo, admitieron que efectivamente sostuvieron relaciones sexuales con la joven, pero que el acto fue consensuado, informa Mirror.

Según New York Post, la joven les dijo a los agentes de policía que ella les pidió a los supuestos agresores que la dejaran salir del baño, que sus amigos la estaban esperando y que no quería estar allí con ellos.

La versión de la joven se empezó a caer cuando algunas personas dijeron que ella había entrado al baño con los jóvenes de manera voluntaria. Además, a lo largo de la investigación se encontraron pruebas contundentes, como mensajes de texto y hasta videos grabados con el celular, los cuales desvirtuaban el relato de Yovino, añade BuzzFeed.

Cuando todas esas evidencias empezaron a surgir, la joven finalmente admitió que su historia había sido un invento con el único objetivo de simpatizarle a un hombre que ella pretendía. Los papeles legales dicen que:

Ella admitió haber inventado la violación de los futbolistas porque fue la primera cosa que se le vino a la cabeza y ella no quería perder (a otro estudiante) como amigo y potencial novio”.

El abogado de la joven, sin embargo, afirma que su clienta se mantiene en la versión inicial. Por la falsa y grave acusación, ahora la joven tendrá que responder ante la justicia y, en caso de ser encontrada culpable, podría pagar una pena de hasta 5 años de prisión.

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