Canadá comenzará a recibir ese mínimo de inmigrantes anualmente para disminuir la presión económica vinculada al envejecimiento de la población, anunció el lunes el ministro de inmigración, John McCallum.

La cifra está muy por debajo de las expectativas después de que un informe la semana pasada sugiriera un incremento de 50%, es decir, hasta unos 450.000 inmigrantes anualmente.

“En 2016, saltamos a 300.000 en gran medida como consecuencia de nuestras acciones especiales respecto a los refugiados sirios”, dijo McCallum.

“Lo que estoy anunciando hoy es que para 2017 fijaremos la cifra de 300.000 como permanente, y se convertirá en la base del crecimiento futuro de la inmigración”, dijo, y agregó que la tasa está “40.000 por encima de la norma histórica”.

Más de la mitad de los recién llegados será solicitante de empleo e inversores. El resto (de esa misma categoría) incluye cónyuges, hijos o padres de ciudadanos naturalizados, refugiados y otros aceptados por razones humanitarias.

La gran afluencia de inmigrantes este año se vio especialmente impulsada por el reasentamiento urgente de unos 30.000 refugiados sirios en situación desesperada.

AFP

LO ÚLTIMO