Nicole y Shane Sifrit, los padres de la pequeña, decidieron llevarla al médico cuando se dieron cuenta de que la niña no estaba comiendo bien, y un día no respondió a los varios intentos que hicieron para despertarla, poco después de que naciera, informa Independent.
Ya en el hospital, Mariana fue diagnosticada con Meningitis HSV1, a pesar de que ningún miembro de la pareja tiene ese virus. Shane, el padre de la niña, dijo:
“En dos horas, ella dejó de respirar y todos sus órganos empezaron a fallar”.
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Las circunstancias indican que Mariana debió contraer el virus de una tercera persona, pero identificarla es poco menos que imposible. Pero dadas las circunstancias, lo más posible es que la niña haya pescado la enfermedad por el beso de algún familiar o amigo. Y, dado que es una bebé menor de 6 meses, es muy susceptible a virus de ese tipo.
Por la enfermedad, Mariana está internada todavía en el hospital de la Universidad de Iowa. Nicole, la madre de la pequeña, dijo:
Tiene equipos para los riñones, equipos para el hígado, equipos de sangre, un equipo neurológico. […] Debo mantenerme fuerte, porque ella todavía está resistiendo con fuerza”.
Según CNN, los médicos han dicho que es posible que la niña tenga problemas de salud a largo plazo en el cerebro y el hígado. Se espera que Mariana pase en el hospital de 3 a 6 meses.
Por eso, los padres de la niña les han recomendado a los papás de otros bebés recién nacidos que eviten que ellos estén en contacto con muchas personas, al menos hasta que su sistema inmunológico esté más desarrollado.
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