“La policía y los bomberos hicieron conjuntamente un par de barridos completos del aeropuerto con trajes de protección”, explicaron los bomberos en un comunicado.

“No se detectaron índices elevados (de sustancias tóxicas) y el edificio fue ventilado, inspeccionado y declarado seguro”, añadió el comunicado, que no precisa las causas que provocaron la alarma y obligaron a atender a los pasajeros.

El servicio de ambulancias de Londres informó que 2 personas fueron hospitalizadas y que 25 fueron tratadas en el lugar aquejadas de problemas respiratorios.

David Morris, de 28 años, fue uno de los afectados. Estaba a la espera de salir en un vuelo para Edimburgo cuando comenzó el incidente.

“Estaba hablando cuando comencé a toser hasta tal punto que ya no podía seguir hablando”, contó el afectado, que calificó la situación como “muy aterradora”.

“En dos minutos, gritaron que todo el mundo debía salir”, dijo y agregó que el personal de la aerolínea había incluso saltado del mostrador.

“Todos gritaban y corrían hacia la puerta”, señaló.

El incidente empezó a las 3 p.m., cuando se activó la alarma de incendios.

“Tres vehículos y un equipo de especialistas intervinieron tras informes de un incidente químico” explicó poco después el servicio de bomberos de la ciudad mediante un comunicado.

“Unas 500 personas han sido evacuadas” explicaron los bomberos.

La cuenta oficial de Twitter del London City Airport indicó que había sido evacuado “a causa de una alarma de incendio”.

El aeropuerto quedó cerrado al tráfico aéreo y los vuelos a punto de aterrizar fueron desviados.

El London City Airport es muy apreciado por los hombres de negocios gracias a su proximidad del centro financiero de la capital británica y a sus vuelos directos a ciudades como París, Amsterdam o Fráncfort.

El aeropuerto es el 13º más importante del Reino Unido y tiene un tráfico de 4,3 millones de pasajeros.

Muchos vuelos quedaron cancelados o fueron desviados hacia otras ciudades.

El empresario español Fernando Bausa se quedó sin embarcar a Madrid.

“Nuestro vuelo fue cancelado después de estar esperando aquí más de tres horas. Ahora estamos tratando de saber qué va a pasar con nosotros y si va a haber otro vuelo mañana”, dijo a la AFP.

Caitlan Russell, un viajero sudafricano que se dirigía a Holanda contó que cuando llegó había gente parada, envuelta en cobijas médicas y que había muchas ambulancias y vehículos de emergencia.

Anne Kunz, una turista alemana que viajaba a Luxemburgo agradeció la atención recibida.

“La ayuda que recibimos fue genial. Recibimos mantas, café y bebidas refrescantes”, contó.

AFP