En concreto, fueron 2 fotos las que ‘levantaron ampolla’: la primera, una en la que aparece la modelo con el niño, que tenía en sus manos un gancho en el que exhibe pulseras para la venta; y la segunda, en la que ella abraza y besa al menor.

A pesar de que las imágenes recibieron miles de ‘Me gusta’ en Instagram, 2 usuarios de Twitter tuvieron una impresión diferente de las fotos y expresaron su descontento por la actitud supuestamente racista de la argentina:

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Según ellos (y muchos otros usuarios de redes sociales), el objetivo de la modelo con las fotos era valerse de un niño desfavorecido para promocionarse a sí misma. Algo así como posar de humilde y descomplicada en redes sociales más por interés que por convicción.

Demner dijo que estaba “enamorada” de Álex, y desmintió que el niño estuviera trabajando. Explicó que el papá de él era quien vendía las pulseras y que el menor lo estaba acompañando porque no tenía con quién quedarse. Álex y ella coincidieron en el mismo lugar cuando el pequeño se quedó con la modelo un rato, según aclaró en Instagram. Sin embargo, no se refirió a las acusaciones que no hablaban del supuesto trabajo infantil.

Para usted, ¿exageran los que rechazan las fotos, o tienen toda la razón? El debate está abierto.