Las críticas al zoológico se presentaron por parte de algunos defensores de animales luego de que en un video con cámara oculta se muestra a uno de los encargados sujetando el pene de un delfín que flota boca arriba.

Los investigadores dicen que aquí no se configura ningún crimen, pues es un procedimiento de rutina “para desestresarlos y evitar que tengan relaciones incestuosas”, reporta el diario Mirror.

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Leonie Vestering, director del partido animalista PvdD, interpuso una demanda por abuso sexual contra animales, pero por ahora se desestima que el caso proceda.

Además, los acusadores dicen que el delfín estaba en una piscina demasiado pequeña y que el cloro no es bueno para la salud de estos animales, a lo que los cuidadores de los delfines respondieron que los tienen allí por cortos periodos, mientras les hacen procedimientos o los mantienen bajo observación.

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