La joven admitió que consumía hasta 4 mil calorías al día en alimentos como hamburguesas, papas fritas y comida rápida, que representaban el doble del límite recomendado por expertos, que aseguran que una mujer debe consumir no más de 1.800, según informes de Web MD.

Al ver que su peso aumentaba cada vez más, esta madre de un niño tomó la decisión de cambiar su estilo de vida de forma radical. Se sometió a una cirugía de ‘bypass’ gástrico, empezó a comer más ensaladas, alimentos saludables y dejó de lado la comida chatarra, retomó New York Post.

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Poco a poco, perdió el peso que tanto la acomplejaba. Pero a pesar del esfuerzo, su cuerpo quedó con exceso de piel suelta que no se podía remover con nada más que con una cirugía, a la que se sometió para retirar 4 kilos de piel.

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Además, se hizo un levantamiento y aumento de senos para lucir como siempre soñó.

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Hoover compartió su historia en Facebook, donde ha publicado varias imágenes del antes y el después de su transformación. En algunas aparece incluso luciendo sus viejas prendas, en las que ahora cabrían 2 personas de su actual tamaño.

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