Su nombre es Diggy, tiene dos años y fue adoptado hace una semana por Dan Tillery, un cantautor de Waterford Township, Michigan (Estados Unidos), una pequeña ciudad donde está prohibida la tenencia de perros pitbull, cuenta el New York Post.

Tillery celebró la adopción del alegre Diggy con la publicación de fotografías de los dos en su cuenta de Facebook.

Dan Tillery / Dan Tillery

La imagen del perro sonriendo de oreja a oreja se hizo viral, animalistas celebraron la adopción, pero la policía local acudió a la vivienda de Tillery, ordenándole reubicar a su mascota fuera de la ciudad, para no sacrificarlo. Así lo relató el artista a CBS Detroit:

El policía dijo: Sabes, no necesitamos mucho más, yo creo que es un pit, y eso es suficiente… Tienes tres días para sacarlo de tu casa”.

Tillery se rehusó a abandonar a su nuevo amigo y tuvo que pagar una multa de 500 dólares. A su favor, las autoridades locales han accedido a permitir que otro veterinario —distinto a los del Centro de Rescates Caninos de Detroit, que gestionaron la adopción— determine la raza del animal.