Y esos detalles los conoce Acosta, un economista quindiano que se convirtió en facilitador del proceso y cuyo papel, siempre en la sombra, se viene descubriendo.

Su trabajo ha sido amplio e incluyente, al punto de que intentó facilitar un acercamiento del expresidente Álvaro Uribe al proceso de paz. Semana reseña que Acosta habló con el hoy senador y que habló con él por teléfono la última vez en noviembre de 2015. “Le dije que se montara con dignidad al tren de la historia”, recuerda Acosta, y afirma que Uribe dijo que no le interesaba la historia.

Del origen de los diálogos con las Farc, Acosta recuerda hechos y fechas importantes como si las tuviera grabadas en la frente. Y el primero de ellos se remonta a finales de los años 90 cuando fue retenido en el Valle por ‘Pablo Catatumbo’. A partir de ahí mantuvo contacto con ese jefe guerrillero.

En entrevista con Caracol Radio, rememora el inicio del proceso que hoy celebra el país, y que comenzó el 12 de julio de 2010, con una carta que le envió al presidente Juan Manuel Santos planteándole la posibilidad de los diálogos. El 29 de agosto Santos le respondió y así organizó un encuentro el 7 de septiembre.

El 14 de septiembre les entrega la comunicación a las Farc, pero el 22 de ese mismo mes las Fuerzas Militares mataron a Jorge Briceño, alias ‘Mono Jojoy’. Sin embargo, el 15 de octubre responden las Farc, y dicen que sí a los contactos.

“Ahí comenzaron las reuniones preparatorias en el 2011 para preparar la ida de delegados de las Farc a Cuba, aunque se analizaron 32 países”, le dijo Acosta a la emisora. “Y se escogió Cuba, entre otras razones porque estaba predispuesto a ayudar”.

En esta parte de la entrevista, Acosta revela un hecho hasta ahora poco conocido, y que tiene que ver con que, según él, después de los fallidos diálogos de Tlaxcala (México), Fidel Castro les dijo a los comandantes de las Farc ‘Raúl Reyes’, ‘Iván Márquez’, ‘Alfonso Cano’ y ‘Pablo Catatumbo’ que no insistieran en la lucha armada en Colombia para conseguir un país socialista.

Castro les dijo, en palabras de Acosta: “Países socialistas en el mundo no existirán más. Yo me tomé el poder porque estaba sacando a Batista que era un dictador, y los gringos tampoco lo querían. Y después logramos que esto se convirtiera en país socialista. Pero eso no se lo van a dejar hacer a nadie más. No insistan en eso”.

La primera reunión preparatoria, con dos delegados de Santos y dos delegados de las Farc, se hizo en la frontera colombo-venezolana; la segunda y la tercera fue en la isla de Orchila, y la cuarta en una hacienda de Rodríguez Chacim en la frontera colombo venezolana, cerca de Cúcuta.

Otro de los detalles curiosos es la designación del primer jefe negociador de las Farc. Acosta cuenta que inicialmente se trató de Mauricio Jaramillo, alias ‘el Médico’, pero no se pudo sacar del país.

Entonces, ‘Alfonso Cano’ designó a ‘Timochenko’ como jefe de la delegación de las Farc. Pero el 4 de noviembre de 2011 el Ejército abatió a ‘Cano’ en el Cauca.

Destaca que, paradójicamente, Cano es el “catapultador” del proceso de paz. “Es el hombre que dice: ‘Esto hay que negociarlo, porque ya no somos capaces de tomarnos el poder y convertir esto en un país socialista. Hay que buscar que este país tenga una economía de bienestar’ ”.

A otro personaje que destaca Acosta es al presidente venezolano Hugo Chávez. “Si no hubiera estado Chávez, la cosa para empezar esto no habría sido fácil”, dice Acosta.

Y para comparar a las Farc de hoy con el ortodoxo Eln hace una analogía de eslóganes. Para Acosta si el del Eln es ‘Patria o muerte’, el de las Farc es ‘Patria o negociación’.

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