Manifestantes que llamaron a boicotear el paso del fuego olímpico se enfrentaron con la policía en Niteroi, ciudad satélite ubicada frente a Rio de Janeiro, al otro lado de la bahía de Guanabara.

La policía utilizó gas pimienta y detuvo al menos dos manifestantes, constató un periodista de la AFP en el lugar. La protesta, convocada por las redes sociales, no consiguió siquiera acercarse a la pira olímpica, ya que los organizadores alteraron la ruta para evitar las manifestaciones.

“Adelantamos el recorrido unos 600 metros, por cuestiones de seguridad, porque había una manifestación”, informó un portavoz de la organización de los primeros Juegos de Sudamérica, que serán oficialmente inaugurados el próximo viernes.

Mario Tama/Getty Images / Mario Tama/Getty Images

Se trata de un procedimiento “normal” en el recorrido de la antorcha olímpica en cualquier ciudad del mundo, afirmaron los organizadores.

La misma medida fue adoptada más temprano en Sao Gonçalo, donde también fue convocada una manifestación y la policía detuvo a tres personas, según confirmó en un comunicado a la AFP.

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Imágenes del portal de noticias UOL mostraron a la policía usando gas pimienta contra los manifestantes, muchos de ellos con el rostro cubierto y vestidos de negro.

La semana pasada, algo similar ocurrió en la ciudad costera Angra dos Reis, tres horas al sur de Rio de Janeiro, cuando manifestantes atacaron la procesión olímpica y fueron dispersados por policías que usaron gas pimienta y balas de goma.

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El miércoles, partirá en barco desde Niteroi hasta Rio de Janeiro, donde será transportada por el alcalde de la ciudad, Eduardo Paes.

En su entrada a Río, la antorcha será custodiada por los atletas de vela Torben Grael, Lars Grael, Clinio Freitas, Isabel Swan, Nelson Falcão, Marcelo Ferreira y Ronnie Sennftm, revela Folha de São Paulo.

A partir de ese momento, recorrerá 90 kilómetros y pasará por 600 manos antes de encender el pebetero en la noche del viernes, destaca el diario paulista. La gira terminará en la zona sur de la ciudad, pasando por los sectores de Gávea, Leblon, Ipanema y Copacabana, antes de ingresar al estadio Maracaná.

Mientras los organizadores presentan el recorrido épico como una oportunidad para encender el entusiasmo del público, repetidos incidentes de seguridad la han convertido en símbolo de las fallas de organización y el descontento social que ensombrece los primeros Juegos en Sudamérica.

Con: AFP

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