Bajo el nombre de Granadina, la también presentadora asegura que vende no solo vestidos de baño y ropa de este corte, sino momentos de playa que se adecuan a cualquier figura y no únicamente a las de mujeres con silueta de envidia como la de ella.
“Después de ser mamá empecé a ver una necesidad de vestidos de baño que fueran más cómodos y versátiles para compartir con tus hijos, que puedas correr, cargarlos, saltar y no estés pensando en que se te va a ver algo de más”, asegura la conductora de Sábados felices.
En cuanto a su nueva faceta como empresaria, asegura que se fue dando, no porque le faltara trabajo o buscara otra fuente de ingresos, sino porque surgió la opción y le pareció bueno intentarlo.
“Estoy en buen momento en el modelaje, querer construir, trascender y hacer algo diferente. Si tú todos los días trabajas en posicionar marcas diferentes, por qué no crear la tuya propia”, cuenta Vanesa.
En cuanto a la escogencia de incursionar en el negocio con vestidos de baño, la respuesta es sencilla: es de lo que más sabe. “Llevo tantos años metida con la moda, y mi fuerte de pronto por el cuerpo han sido las campañas de vestidos de baño y ropa interior, me empecé inclinar mucho por este tema”, añade.
Desde luego Vaneza es la modelo de su empresa, pero no descarta tener otras mujeres en futuras campañas. Además, trabajó con compañeros con los que ha trabajado muchas veces y a los que fue fácil invitarlos al proyecto: “fueron las mejores fotos que he hecho en mi vida. Todos le entregaron alma y corazón”.
Pese a que estrena empresa, la paisa sostiene que sigue firme en su labor como presentadora. No obstante, también confirma que en lo que no se hará competencia ella misma. “No creo que haga otras campañas para otras marcas de trajes de baño”, concluye.
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