Será la primera boda real en siete años y llega en un momento plácido para la Casa Real, sin escándalos y con una alta aceptación entre los británicos.

“Desde que William se casó con Kate, todo ha sido magnífico para la familia real, los jóvenes sienten más interés por ella y la aprecian más”, dijo a la AFP Donna, de 46 años.

Harry es nieto de la reina Isabel II y segundo hijo del príncipe Carlos y la malograda Diana, después de William.

El artículo continúa abajo

El príncipe sirvió en el ejército, en la guerra de Afganistán, y el anuncio de su boda culmina su viaje a la madurez después de una infancia y una adolescencia marcadas por la muerte de su madre y algunos gestos de rebeldía.

Markle, por su parte, será la primera miembro mestiza de la Casa Real británica. Divorciada de su primer marido, un productor de cine con el que estuvo casada dos años (2011-2013), esta actriz encarnó a una abogada en la serie de televisión ‘Suits’.

Es la segunda divorciada estadounidense que entra en la Casa Real británica después de Wallis Simpson, la esposa de Eduardo VII, el tío-bisabuelo de Harry que abdicó en 1936 tras sólo 10 meses en el trono.

Lo que en otra época era polémico, en esta puede ayudar: “demostrará que Harry es un hombre profundamente moderno, a la altura, y no una criatura extraña venida de otro planeta, como se percibe a veces a los miembros de la Casa Real”, dijo a la AFP Penny Junor, biógrafa del príncipe.

Con AFP