Sin haber visto la cinta, incluso atacó el acento usado por la protagonista y su edad, así como la de Bardem, que es muy diferente a la que tenían ella y Pablo Escobar cuando se enamoraron: 32 años (Bardem tiene 49 y Penélope, 43).

Vallejo incluso se ofreció a darle clases de dicción a Penélope Cruz para que no tuviera acento ni rolo ni paisa, sino que sonara neutral, como el de ella.

“Es que mi libro es una historia de amor, pero también es una historia sobre la corrupción. A diferencia de otros libros sobre Pablo Escobar, el mío es uno que tiene alma, porque tiene dolor, tiene humor, tiene historia y además denuncias contra 4 familias presidenciales (a las que acusó de nexos con los carteles de Medellín y de Cali). Obviamente, ha sido perseguido de manera inmisericorde… y esos denunciados han hecho todo tipo de arreglos con mis propias editoriales para ver cómo me robaban todo”, dijo Vallejo a La W.

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Vallejo asegura que los dueños de la productora Dynamo, los socios de Bardem, son familiares de Santos.

Vallejo fue a detalles más puntuales, asegurando que no era cierto que se hubiera acostado con Escobar el primer día que lo conoció o que lo hubiera visitado cuando estaba preso en la cárcel La Catedral.

“La primera parte del libro es la del ensueño y la inocencia. Cómo 2 personas tan jovencitas se enamoran… pasaron 7 meses antes de que por fin tuviéramos intimidad”, dijo.

En preámbulo de la entrevista, Julio Sánchez dijo que al ver la película también extrañaba la marca de Virginia: su clase, su estilo, su elegancia, su cultura, la vida fina.

Y en otro aparte de la entrevista ella se encarga de enfatizar esa clase, que no fue obstáculo para terminar en brazos del capo: “Antes (de conocer a Pablo Escobar yo) estaba comprometida con otra persona, un hombre guapísimo, y obviamente de mi misma clase, sobrino de un presidente, y cuando yo fui a la hacienda (Nápoles), fui con un grupo de amigos de mi mismo nivel, amigos todos, todos están vivos, todos”, dijo.

Vallejo agregó que después de pasada la etapa del enamoramiento, pasó a una historia de amor “terrible”.

“Luego va evolucionando a medida que yo voy descubriendo la verdadera personalidad de Pablo, que no es ese filántropo sino que va camino de convertirse (en) un monstruo, y lo dejo varias veces; lo dejo en 1984, lo dejo varias veces en el 85. Me fui a vivir en Islas del Rosario en el 86, y luego me hizo regresar a él en 1987. Cuando me cuenta lo que va a hacer él en el futuro para arrodillar al Estado y en ese momento acabo completamente la relación con él”, dijo.

Virginia Vallejo vive exiliada en Estados Unidos, donde argumentó persecución política de los gobiernos Uribe y Santos.

Claramente, la paranoia no se limita a las familias presidenciales, sino que se extiende además a Bardem, a sus socios y los medios colombianos, en particular ‘El Espectador’.

La película ‘Loving Pablo’ se estrenó el 9 de marzo en España y aún no llega a Colombia.