Evans es colaborador de Omaze, una ONG dedicada a niños que padecen de cáncer, y para ayudarlos decidió transformar una tienda de cómics en una habitación llena de acertijos, informó E! News.
Con ayuda de un muñeco parlanchín, ubicado en una mesa del almacén y conectado a un micrófono, el actor invitaba a varios visitantes a que siguieran sus instrucciones y participaran en el reto ‘Escape Rooms’ (salas de escape).
Desde otro cuarto, Evans podía hablar y ver las reacciones de los participantes. Cuando todos estuvieran dispuestos a seguirle la cuerda, el juego empezaba.
Algunos de los retos más divertidos fueron buscar un código secreto de cuatro cifras y ponerse máscaras para encontrar un agente escondido.
Más adelante, los participantes debían entrar por una puerta secreta que conducía a un sótano. “Ahora que saben de que se trata Escape Rooms, veamos si tienen lo necesario para salir de una de ellas”, decía el actor a través del muñeco.
Afortunadamente, los participantes no tenían que escapar del cuarto y Evans los esperaba para darles una gran sorpresa.
La idea es que el video se viralice, para recaudar fondos que servirán para brindar hogares temporales a familias de niños que reciben tratamientos de quimioterapia en hospitales de Boston.
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