“No tuvo patrocinios, no tuvo mucho tiempo para publicitarse como los festivales anteriores”, comenzó diciendo Sánchez Cristo, antes de preguntarles a los demás integrantes de la mesa de La W cuál creían que era la razón para que eso hubiera sucedido.

“Puede ser una cosa: que lo manejó un privado, lo operó un privado”, afirmó Julio, luego de aclarar que fue una empresa que sabe del tema la que se encargó de todo: “esta vez lo operó un profesional del negocio”.

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Aunque dar el contrato a TuBoleta fue una decisión de la junta directiva actual, que es privada, al igual que la anterior, Sánchez recordó que el festival viene de sufrir “las pérdidas y los huecos y lo que pasaba. Las cuentas nunca cuadraban, todos estaban quebrados, que la plata para fulano, que la plata de fulano”.

Como reiteró, “esta vez no hubo patrocinio, no hubo publicidad, pasaron suavecito, hubo gran festival, y ganaron plata”, lo que para él es “muy grave para los años anteriores. Quiere decir entonces que hay unas explicaciones que dar”, y menciona al hijo de Fanny Mikey, Daniel Álvarez Mikey, y a la anterior cabeza del Iberoamericano, Ana Marta de Pizarro.

Y es que según la información del Festival, este año hubo más de 200 mil espectadores durante los 17 días que duró el encuentro teatral, que celebró 30 años de historia.

“Se hizo una inversión de cerca de 12 mil millones de pesos para hacer el festival. Pero nuestro reto era rescatar la confianza del público y creo que lo hemos logrado. El gran repertorio y la calidad de las obras, así como los directores y talentos de las compañías presentes en el Festival son razones suficientes para apostarle a la cultura. En total, se emitieron 210 mil boletas, y hubo 2 mil abonados fieles al Festival”, señaló Hernando Sánchez, Gerente General de Tuboleta.

Se presentaron obras de países como Australia, Dinamarca, Eslovenia, España, Grecia, Italia, México, Letonia, Noruega, Holanda y Suiza, que tuvieron 211 funciones en 23 escenarios

Paralelamente, las calles se vistieron de fiesta y recibieron el teatro en 20 localidades de Bogotá, además de 3 veredas y 1 municipio en donde disfrutaron las diversas muestras de teatro colombiano.

El cierre, aunque con algunas quejas de los asistentes en cuanto a logística, puso punto final por lo alto con el espectáculo ‘Water Fools’, de la compañía francesa Ilotopie, que tuvo el apoyo de Idartes.

En la organización, TuBoleta tuvo el papel de productor e inversionista, Konfigura se encargó de crear la reestructuración financiera del Festival y Páramo Presenta aportó su experiencia como productor de espectáculos masivos y conocimiento del mercado para llegarle a nuevas audiencias, según el comunicado de balance que envió el FITB.