Pero a lo largo de sus ocho meses de gestación, Jenny ha tenido que sortear una triste noticia, que recibió en el mismo mes que supo que estaba esperando a su primera hija, y que compromete a uno de los amores de su vida: su padre, que padece cáncer, desde febrero.

Así lo contó la misma Jenny a ‘La Red’, donde explicó lo triste y lo feliz que ha sido estar en medio de dos situaciones tan opuestas:

En febrero yo tuve las dos noticias, que son como entre la vida y la muerte. Primero nos enteramos que mi papá tenía cáncer. Mi papá que ha sido alentado toda la vida; 72 años, y en 70 años nunca estuvo en una clínica. Y a los 15 días me entero que estoy en embarazo. ¡Oh, my God! Ha sido fuerte durante todos estos meses porque es estar todos los días en una clínica, ya sea por tu papá o por tu bebé, pero es como la realidad de mi vida, lo que ha pasado en este semestre”.

La actriz, que ha hecho papeles como el de la estudiante Jenni en ‘Padres e hijos’ y la prepago Ximena en ‘Sin tetas no hay paraíso’, agregó al programa que la espera de Hanna Zoé le dio motivación a su padre para luchar contra el cáncer:

Ella ha sido como una gran motivación para él. Además, se sabe el nombre, en medio de todo cuando estuvo muy mal siempre era como: ‘Bendición a Hanna Zoe’. Él no ha estado triste, yo lo llamo fé, como esa esperanza […] Las quimioterapias no fueron tan dolorosas como decían, no se le cayó el pelo; antes le daba como vida. Y bueno, lo estábamos asimilando muy bien”.

Sin embargo, hace unos días la enfermedad le quitó la movilidad al papá de Jenny, justo por los mismos días en que ella iba a hacer su primer ‘baby shower’, recordó la actriz, en medio de lágrimas:

De hecho, yo duré preparando mi ‘baby shower’ como en tres ocasiones porque en ese preciso momento, cuando ya vamos a hacer mi primer ‘shower’, mi papá pierde la movilidad de su cuerpo. Nosotros solo preguntábamos: ‘¿Dios mío, qué pasó?’, y vamos a ver y el cáncer le hizo metástasis en su cerebro. Entonces, comienzan con otro tratamiento, con radioterapias. Todos pensamos que se iba a morir porque perdió el habla, no se alimentaba, no se movía, nada… Y bueno, después de terminar sus radios, en este momento, ya volvió como a salir adelante”.

Ahora, y aunque sigue triste por la situación de padre, Jenny se alista para la llega de Hanna Zoé, incluso, manteniendo su rutina de ejercicios, entre otros de pilates y natación, pero más acordes a la relación que desde el vientre está formando con su primera hija, como se ve en un video de ‘La Red’.

LO ÚLTIMO