Para los trabajadores, el incremento debe estar por el orden del 10 %, es decir, subiría más de 70.000 pesos y pasaría de 800.000 pesos.

Pese a que algunos sectores consideran elevada la propuesta, el presidente de la Confederación General de Trabajadores (CGT), Julio Roberto Gómez, citado por Caracol Radio, aseguró que “la tesis que un incremento mayor genera desempleo quedó totalmente reevaluada”.

De ser acogida la propuesta de los trabajadores, el salario mínimo de los colombianos pasaría de los $ 737.717 actuales a $ 811.488, es decir, el incremento sería de $ 73.771. El auxilio de transporte, por su parte, quedaría fijado en 91.454 pesos.

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La posición de los trabajadores es muy distante de la que otras entidades han presentado en las últimas semanas frente al aumento que se debería dar para el próximo año. La Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, por ejemplo, aseguró que no puede superar el 4,5 %, es decir, debería fijarse en cerca de 780.000 pesos.

“Un mayor incremento del salario tendría el riesgo de mermar la buena generación de empleo que se ha tenido durante 2017, debido a las rigideces estructurales del mercado laboral colombiano”, advirtió Anif en un informe replicado por RCN Radio.

Otra mirada la tiene el Banco de la República, que hace pocos días emitió un informe en el que recomienda que en Colombia se establezca un salario mínimo diferencial por ciudades.

“Se hace manifiesta la oportunidad de tener salarios mínimos regionales, dada la disparidad de la productividad de la mano de obra. Tener un salario mínimo para todo el país con el propósito de mitigar la desigualdad puede dificultar esta tarea, si no se tienen en cuenta los niveles de productividad y otras características de cada región”, agrega el documento del Emisor, replicado por Caracol Radio.

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