Una de ellas es Ana María, una publicista que aseguró a La W que en el grupo de las ‘Wikimujeres’, que nació en abril de 2015 en Colombia por iniciativa de la argentina Geraldine Pomato, se realizan prácticas de matoneo contra marcas y productos, sin posibilidad de que las empresas se defiendan frente a las acusaciones.

“Ellas (las ‘wikimujeres’) tienen, supuestamente, un reglamento según el cual no se puede decir nada de una marca, sin antes consultarle a la marca. Pero en realidad, empezando por la señora que es líder de este grupo, que publica cosas sin preguntar a las marcas, sin ni siquiera tomarse el momento para salir, enviar una queja, un reclamo, entonces lo que pasa en realidad es que es un matoneo continuo a marcas y productos colombianos que no tienen derecho a defenderse”, contó Ana maría a ese medio radial.

Según ella, hay varias preguntas que formular frente al manejo del grupo. Por ejemplo, cómo se controlan los contenidos que ponen no solo quienes son miembros de este grupo, sino la líder del mismo, y cuáles son los criterios para empezar a criticar un producto o una marca.

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La W, por su parte, asegura que se contactó con personas de varias marcas y empresas que aseguran que las ‘Wikimujeres’ fueron a ofrecerles un portafolio para pautar en el grupo, para que tuvieran publicidad dentro del mismo y se hablara de las marcas y de los productos a esas 13.000 mujeres que lo integran. Y el costo no era nada barato.

“Lo que nos ha pasado con algunas marcas es que la respuesta del grupo (frente al matoneo) es ‘si usted quiere que esto pare, hay una forma y es una forma comercial’”, reveló Ana María.

Una de las compañías que habría sido afectada por el matoneo de las ‘Wikimujeres’ es Alpina. Natalia Ulloa, una exintegrante del grupo, contó a Pulzo que Geraldine parecía un dictador y sacaba a las personas por llevarle la contraria en discusiones abiertas sobre empresas.

“Destruía marcas como Alpina y pedía a sus seguidoras que no la compraran más porque ella no confiaba en sus productos ya que hacían publicidad engañosa (sin ningún tipo de evidencia)”, aseguró Ulloa, que fue expulsada del grupo por expresar desacuerdo con el reglamento.

Geraldine, por su parte, se refirió en Blu Radio a los cobros que les hacen a las marcas y empresas por supuesta pauta publicitaria. Según dice, ella se dedica al tema de mercadeo y les ofrece servicios de estrategias de comunicación bajo ciertas condiciones.

“Muchas de esas alianzas tienen que ver con impulsar los emprendimientos de los integrantes o para hacer alguna causa puntual. Eso me ha permitido contratar a siete personas en el equipo, y nuestros aliados son patrocinadores de que nosotros podamos dedicarnos a esta labor social porque el 97 % de nuestro tiempo va dedicado a la comunidad, a apoyar a las mujeres (…) estas asesorías estratégicas se las damos a las marcas con un pago”, explicó.

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Y negó hacer matoneo a las empresas que no aceptan las propuestas comerciales del grupo. “No es cierto que nosotras cobremos por no hablar mal. Es delicada esa acusación. Somos una empresa totalmente transparente”, agregó.

Además, refiriéndose a ese mismo tema, publicó un comunicado en la página de Facebook de las ‘Wikimujeres’, en el que asegura:

“En WikiMujeres pueden realizarse recomendaciones de profesionales, prestadores de servicios o en relación con la comercialización de productos, bienes o servicios sobre lo cual cada persona como usuario o consumidor puede ofrecer a la comunidad su percepción, respetuosa respecto a su experiencia personal y sin promover denuncias negativas frente a personas individuales”.

Pulzo intentó contactarse con Alpina para conocer su opinión al respecto, pero hasta el momento no ha habido respuesta alguna.

¿Estrategia de matoneo o chantaje?

La práctica de matoneo consiste en que algunas de las ‘wikimujeres’ comienzan a hablar mal de una marca y si la empresa quiere que el tema pare, tendría que pagar para que se termine la mala publicidad.

“El terror que se les tienen a las wikis es grandísimo, quién quiere exponerse ante esta audiencia furiosa y que empieza el matoneo. Donde alguna marca salga a decir algo, pues, imagínese usted lo que le pasa; si, sin decir nada, y les pasa lo que les pasa, cómo sería haciendo una denuncia”, dijo Ana María a La W.

Frente al tema, el periodista Felix de Bedout aseguró que una cosa es que se pueda hacer una crítica y de buena fe y otra que se hable de cobrarle a una empresa para que no se hable mal.

“Hay que insistir en algo, eso es un chantaje. O sea ya estamos entrando en otro campo muy diferente”, sostuvo de Bedout.

Ana María, por su parte, agregó que “las ‘wikis’ para el mundo de la publicidad y las marcas pueden ser en algunos casos un ‘focus group’ interesante, las opiniones de los consumidores son terriblemente importantes para las marcas, ese material es muy importante. Y ahí yo le veo el valor”.

Sin embargo, reconoce que el problema viene cuando ellas tienen un reglamento donde no se puede dar el matoneo sin permitir que la marca se defienda y esto no se cumple.

“Y lo que pasa es que, empezando por la líder, se ataca el producto, se ataca la marca, todo el mundo se viene encima y no se le da la oportunidad. En algunos casos uno se pregunta, ¿hay una oferta comercial? ¿Cómo es que se mueve esto?”, agregó Ana María, que no quiso mencionar a ninguna marca en particular por temor a que se afecte su labor como publicista.

Reconoció también que las mismas marcas y empresas saben que en el interior del grupo hay planes comerciales, hay ofertas.

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