La frase que usó en varios de sus videos, populares durante la pasada Copa América, relacionada con que ojalá hablaran de ella, para bien o mal, se convirtió en una obsesión para la mujer de 19 años, que ahora se lucra de lo que sube en Facebook, Instagram, YouTube y Snapchat.

Daneidy se volvió famosa no solo por sus particulares videos, sino por presentarse ante los medios de comunicación como una mujer de estrato medio, con una personalidad única, a la que poco le importan las críticas (que son y han sido muchas).

Ahora, la popular ‘Epa Colombia’ dejó a un lado la simple afición a las redes sociales y la convirtió en un negocio, en el que cobra hasta 500.000 pesos por subir un video o una foto a sus cuentas.

“Me pueden pagar de 100.000 hasta 500.000 pesos por subir vídeos o fotos con marcas de ropa, algunas empresas de Medellín me han pagado por eso”, aseguró Daneidy al portal KienyKe, en donde también contó que ya firmó un contrato con una agencia de ‘youtubers’ porque, según dice, quiere “seguir aumentando su publicidad”.

Es tan bueno el negocio, que ya compró moto, pero asegura que quiere seguir estudiando entrenamiento en el Sena, independiente de los planes que tiene de convertirse en una gran ‘youtuber’. Entre los productos que promociona se destacan cremas y otros de belleza.

Desde la mirada de las empresas, el uso de Daneidy puede entrañar un riesgo. Se trata de una mujer que polariza mucho, muestra de ello son los comentarios que le dejan en sus redes sociales (buena parte de ellos con ofensas que van desde “ñera”, “vulgar” y “guisa”, entre otros), por lo que no es garantía que lo que ella diga sea tomado a favor por los usuarios o posibles clientes de un producto. ¿Está dispuesta una marca a ser asociada con la faceta negativa de Daneidy? No es sino ver la reacción negativa hacia el Canal Caracol por haberla presentado en su programa de la mañana. Incluso viéndola como una mujer de extracción popular, no cuenta con apoyo unánime dentro de la gente que podría representar.

Otro aspecto es que Daneidy no tiene suficiente gasolina para mantener la atención: no es alguien que tenga discurso para crear permanentemente conversación a su alrededor, por lo que a veces termina acudiendo a recursos rebuscados. Tuvo su cuarto de hora durante la Copa América, cuando se convirtió en un ‘hit’ por su coro de “Eh eh, epa Colombia” y pare de contar.

Sin embargo, a juzgar por las cifras que ella menciona, se ve que se asesoró y ya sabe capitalizar muy bien lo que tiene en redes… muy al estilo de los ‘youtubers’ famosos de América Latina.

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