El aval del ente regulador se traduce en una cesión de activos de la empresa de prendas de ropa, que anunció su salida del país hace varias semanas. Los contratos con sus clientes también pasarán a manos del Banco Popular.
La Superfinanciera, citada por el diario La República, anunció también que otorgará 2 meses para que se lleve a cabo la cesión de lo mencionado anteriormente, y el proceso deberá ser informado previamente a esa misma entidad.
Lo cedido por Ripley, asegura el diario El Tiempo, se traduce en las cuentas de sus 244.000 clientes con tarjetas de crédito. El monto de la operación no se conoce aún, pero el total de activos en Colombia que tenía esa marca de tiendas chilena alcanzaba los 142.000 millones de pesos, según la Superfinanciera.
El comunicado del ente regulador establece también que todo lo relacionado con reportes de información ya no depende de Ripley, sino del Banco Popular.
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