Y ese triunfo fue el récord Guinness a la mayor cantidad de jugadores en un partido, que se disputó en el estadio Bicentenario de la Florida, de la capital chilena.

Con la cordillera de los Andes de fondo y poco más de mil personas en las gradas como testigos, el tablero electrónico se detuvo pasadas las seis de la tarde de este domingo, tras seis días de juego ininterrumpido.

Se enfrentaron dos equipos apenas denominados como el equipo blanco y el equipo azul, en los que, a lo largo de los días, jugaron hombres y mujeres mayores de edad. El ganador fue el equipo blanco.

Horas más tarde y tras idas y vueltas con la verificación de las planillas, la agente enviada para certificar el récord dio el anuncio: el campeón de la Copa América-2015 sumó un nuevo triunfo.

Chile se queda con “el récord para la mayor cantidad de jugadores en un partido de fútbol (…) título mundial con 2.357 jugadores”, dijo Evelyn Carrera, adjudicadora de Guinness World Records, en rueda de prensa.

Los chilenos pretendían que se certificara el récord como partido más largo del mundo con 120 horas, pero Guinness solo certificó la marca de cantidad de jugadores lo que deja vigente como partido más largo al jugado en Inglaterra el año pasado con 105 horas, explicaron a la AFP los organizadores del evento.

La pelota no para

Si para el astro argentino Diego Maradona la máxima del fútbol es que ‘la pelota no se mancha’, para los chilenos la clave está en que no pare de correr.

Con el balón al medio, el fútbol comenzó a rodar en la tarde del martes en un sistema de rotación de árbitros y jugadores, que debían jugar como mínimo una hora.

Se superaron días de lluvia, noche de intenso frío hasta llegar a un soleado domingo en el que se cumplió el objetivo desatando un festejo digno de los grandes campeonatos, con papel blanco picado en honor al campeón y fuegos artificiales.

Uno de los tramos del maratónico encuentro se dio el miércoles con el enfrentamiento entre un equipo de jugadores amateur representantes de los Mapuches, la etnia más numerosa del país, contra un plantel integrados por habitantes de la Isla de Pascua, ubicada a más de 3.000 kilómetros de Chile Continental.

Este récord es el segundo conseguido en el ámbito deportivo por el país sudamericano que en 1949 logró en equitación un salto de 2,47 metros de altura, una marca que sigue vigente.

LO ÚLTIMO