Teófilo Gutiérrez y Sebastián Saja fueron compañeros en Racing de Argentina, en donde un encontronazo entre ambos deterioró su relación, pues según trascendió, el colombiano le apuntó al hoy entrenador con un arma que a la vista parecía ser real.

No obstante, cuando se vieron en Barranquilla, justo antes del pitazo inicial, el atacante atlanticense corrió saludar al argentino, apretó su mano, le dio un abrazo, palmaditas y cruzó un par de palabras con él, demostrando que los rencores entre ambos quedaron en el pasado.

Los colaboradores de Saja soltaron una sonrisa ante este inesperado gesto, ya que había curiosidad por saber qué iba a suceder entre ambos.